Ya las cenizas de Fidel acampan en Camagüey, en la Plaza Mayor General del Ejército Libertador Cubano Ignacio Agramonte, de quien escribió un poeta:
Y su cadáver augusto
Quemaron en Camagüey
Porque el muerto daba susto
A los soldados del Rey.
De igual forma las cenizas de Fidel asustan a sus enemigos.