sábado, 27 de septiembre de 2014

Registran por primera vez en Europa el medicamento cubano Heberprot-P









Foto: Calixto N. Llanes/Juventud Rebelde.



La única terapia de reemplazo desa­rrollada en el mundo capaz de lograr granulación efectiva y potenciar la cicatrización en úlceras del pie diabético, el medicamento cubano Heberprot-P, del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), fue registrado oficialmente hace pocos días en Turquía.
Aún bajo la probada efectividad de este producto, con el que se han be­neficiado hasta la fecha unos 31 mil­ pacientes cubanos y más de 150 mil de otras 20 naciones, persistía la resistencia de varias multinacionales de medicamentos para que este fármaco líder se registrara en Europa.
De ahí que —explicó a Granma Omer Giray, presidente de la compañía turca GIRAYLAR (con una década de negocios en Cuba) y socio comercial de la compañía HASBIOTECH, de esta misma nación— el registro del Heberprot-P en Turquía por esta última empresa, fundada única y exclusivamente para hacer negocios con Cuba en el campo de la biotecnología, representa un paso significativo.
“Si bien hoy Turquía no es miembro completo de la Comunidad Eu­ropea, sí hay acuerdos importantes firmados entre nuestro país y la Unión, como son los referentes a la industria farmacéutica y el registro de medicamentos. Así, tener el producto registrado en Turquía es paralelo a tenerlo registrado en Europa, gracias a estos convenios. Aunque de un país a otro puede haber pequeños cambios por las características de cada territorio, la forma que se utiliza para el registro es la misma o muy similar”, señaló.
“Queremos ampliar las relaciones entre nuestros países. En este sentido, la biotecnología es una de las esferas comerciales más importantes entre ambas partes y esperamos que cada día sean más fuertes y prósperos los vínculos”.
Por su parte, el doctor Luis Herrera Martínez, director general del CIGB, comentó que el resultado obtenido es de trascendencia en el plano comercial, regulatorio, y de las relaciones bilaterales.
“La diabetes en Turquía, como en todo el mundo, es un problema de salud serio. Hablamos de una na­ción de 80 millones de habitantes donde se estiman no menos de cin­co millones de diabéticos. De es­tos deben padecer úlcera del pie diabético, más de 100 mil personas anuales, y no menos de 60 mil deben ser tributarios de este tipo de medicamento. La introducción del Heberprot-P debe permitir reducir alrededor de 40 a 50 mil amputaciones, lo cual se traduce en términos de bienestar para la población”, refirió el doctor Herrera.
Otros importantes productos del CIGB como el Heberon Alfa- R están siendo comercializados en Turquía y Azerbaiyán junto al Heberprot-P. Se encuentran en fase de registro otros medicamentos del Centro de In­munología Molecular (CIM) como el anticuerpo monoclonal para el tratamiento del cáncer de pulmón, Rocotumobab y ya están registrados otros como el Epoetin Alfa y el Filgastrim.
Para el investigador Jorge Berlanga Acosta, responsable del proyecto de cicatrización y citoprotección del área de investigaciones biomédicas del CIGB, sin duda el Heberprot–P podrá ayudar a reducir los índices de morbimortalidad en Turquía por esta enfermedad. “Mantenemos una sistemática vigilancia en términos de la competencia de otros productos, y el nuestro continúa siendo líder para una entidad huérfana de un tratamiento diferente al de una cirugía mutilante. El Heberprot-P sigue siendo la única opción; con varias ventajas: prolongar la sobrevida del paciente cicatrizado, y prevenir de una manera significativa la recurrencia de la úlcera; beneficios que hasta el momento no logra ninguno de los medicamentos aprobados internacionalmente”, dijo.
Añadió el señor Omer Giray que existen otros proyectos conjuntos dentro del campo de la biotecnología, como la construcción en Turquía de una planta de producción para llenar y envasar productos cubanos, que debe estar lista a finales del 2015. “Así los costos se abaratarán mucho para Cuba si logramos producir y mandar luego a sus clientes desde el Medio Oriente hasta África y parte de Rusia”.
“Tenemos además esperanzas puestas en los resultados de la vacuna contra la hepatitis C que se en­cuentra actualmente en fase experimental en el CIGB. Queremos ser socios y procesar todas las fases. Asumiremos todos los costos y riesgos sin dejar que afecte a la parte cubana y confiamos en que sacaremos en poco tiempo un producto al mercado mundial juntos”, refirió.
El Heberprot-P fue además recientemente aprobado por el De­par­ta­mento del Tesoro de los Es­tados Unidos, que concedió la licencia bajo el concepto de responder a una ne­ce­­sidad médica no resuelta para que su máxima autoridad reguladora, la FDA, someta a estudio este producto.  (Tomado de Cubadebate, fuente periódico Granma)