martes, 4 de octubre de 2016

Ante la cercana llegada de Matthew, Santiago de Cuba espera, sin dejar de prepararse






 .Orlando Guevara Núñez

Son las 8 de la mañana del martes 4 de octubre. La espera del impacto del huracán Matthew  se prolonga. Pero la amenaza está cercana. Los árboles se mecen de forma natural, sin poder percibir que muchos de ellos corren el riesgo de ser derribados dentro de pocas horas.
El huracán sigue con categoría  4, con vientos de más de 230 kilómetros por hora. Anoche, el primer secretario del Partido en la provincia, Lázaro Expósito Canto, ofreció por la televisión una amplia información al pueblo sobre la situación actual.
Toda la población está preparada. Está ocupada. Muchos en la tarea de preservar vidas y recursos. Otros, prestando servicios; miles, ya evacuados. Todos, atentos y alertas, con ojos y oídos fijados en  los medios de comunicación.
La orientación a la población no ha cesado un solo momento, Y cada minuto se aprovecha para reforzar las medidas. Ya se reportan fuertes oleajes en la zona sur de la provincia de Santiago de Cuba, donde ya las personas están evacuadas.
Los medios de comunicación informan como ya, desde las hermanas provincias  centrales y occidentales, parte ayuda hacia el oriente cubano, ante los posibles daños. La solidaridad se está adelantando al huracán.
La gente se nota preocupada, pero no turbada. Confía en que todos los recursos están dispuestos para preservar su vida. La salud y la alimentación están aseguradas. Solo queda esperar las próximas horas. La certeza del embate nos fortalece. Seguimos esperando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario