.Orlando Guevara Núñez
Casto Amador, santiaguero,
fue uno de los más destacados combatientes clandestinos y del 30 de noviembre
de 1956. Fallecido.
Sus vivencias sobre aquel
amanecer verde olivo de la ciudad de Santiago de Cuba, cuando marchaban hacia
el combate, son un testimonio elocuente
de cómo los santiagueros reaccionaron ante aquella acción heroica.
“La caravana se dirige
contra el tráfico por Estrada Palma hacia Martí. Se escuchan las notas del
Himno del 26 de Julio y del Himno Nacional, gritos de ¡Abajo la tiranía!,
¡Abajo Batista! ¡Viva la Revolución!
¡Viva Fidel Castro! El espectáculo gigante que las revoluciones
producen, llegaba a los ojos de los combatientes, estimulándolos. Hombres,
mujeres, niños y ancianos se asomaban a las puertas, respondiendo con vivas a
la Revolución, a Fidel… y aplausos. Alguna que otra madrecita ya entrada en
años, unía sus brazos sobre el pecho, sin que sus labios llegaran a pronunciar
palabra alguna, pero sus gestos eran maternales y sentidos”.
“Subimos San Félix y ya
próximos a Santa Lucía, de nuevo se renovaron los vivas y gritos al pasar por
donde se encontraba el cuartel general insurrecto”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario