Mantengamos puro el espíritu de nuestros pueblos para que no nos deslumbre el tamaño, ni nos corrompa el espectáculo del amor excesivo a la riqueza

 

Orlando Guevara Núñez

 

 Encontramos esta aseveración en el tomo 22 de las Obras Completas, dedicado a Fragmentos. Se afirma,  en nota preliminar,  que sin que sea posible determinar fechas exactas, se deduce  hayan sido escritos, en su mayor parte, entre  1885 Y 1895, en Nueva York. 

 A este pensamiento, en párrafo anterior, afirma nuestro Apóstol: “¿Quién, quién pretenderá divorciarnos a nosotros de la América, ni a la América de nosotros? Ella, como túnica imperial sin mancha. Nosotros sin ella, como hijos sin madre”

 Obsérvese  lo constante en la prédica martiana de la importancia de la unidad de los pueblos de América y el peligro que para su independencia representan los Estados Unidos.